La infantería de la Falange

Los acompañantes de la Caballería de Compañeros eran la otra parte de la maquinaria de guerra macedonia. La Infantería de la Falange marcó una época en la historia de los ejércitos helenísticos, siendo el ejército mas poderoso hasta la creación de las legiones romanas.

Desarrolladas por el padre de Alejandro, Filipo II, la Infantería de la Falange macedonias es una unidad fuertemente armada y entrenada para luchar en formación. Mientras que el hoplita típico de la Grecia contemporánea se había desecho de gran parte su armadura para ser más rápido y resistir más en el campo de batalla, el desarrollo de tácticas de caballería efectivas por los macedonios permitió aliviar la presión a la que estaba sometida la infantería. 

Equipados con escudos hoplitas y ataviados con pesados cascos de bronce, petos y canilleras sobre una armadura de cuero, las falanges son capaces de presentar una formidable barrera gracias a sus lanzas, más largas y resistentes que las de cualquier otra unidad o cuerpo de infantería de la época. Aunque bastante lentas cuando están en formación y vulnerables por los flancos y la retaguardia, suponen una plataforma estable que permitió a Alejandro crear los planes de batalla más ambiciosos.

Las falanges estaban organizadas por una hilera de no mas de 12 o 15 hombres de fondo, cuyas lanzas apuntaban hacia adelante, hacia el enemigo. Cuando esta avanzaba se podía divisar un bosque de sarissas (nombre de las lanzas) que lentamente se acercaba. Fueron el complemento perfecto de los Hetairoi, ya que mientras la Infantería de la Falange contenía a los enemigos, la caballería los barría por el flanco o la retaguardia,

Detener a la falange en pleno avance se volvió practicamente imposible, hasta la batalla de Cinoscéfalos (197 a.C.) en donde la vieja manera de los macedonios se enfrentó a la nueva manera de los romanos.